En mi jaula
En mi jaula espero ansiosa a que mi amo regrese, para que me de placer, para por fin recibir mi justo castigo.
Mi amo me tiene aquí encerrada en mi jaula, desde hace varios días. Por un lado me vuelvo loca de aburrimiento pero por el otro estoy feliz porque solo ha dejado la comida justa. Adelgazaré, eso espero, esa es la principal razón de haberme convertido en una perrita, la humillación de andar caminando entre la gente con mis inmensas lonjas, que mi infame glotonería me había impedido disminuir. Aquí estoy mejor, protegida entre estos barrotes del escarnio público, del "no estás gorda" cuando yo sé que sí...