Cuando yo domino
Después con unos besos suavitos, me subí a altura de su sexo y empecé a moverme despacio sin que su pene logre ingresar a mi vagina, sentía su calor y su desesperación de penetrarme, rozaba despacio mi clítoris con su miembro lo apretaba lo masajeaba, le mordía los labios, el cuello y me tocaba los pechos todo esto lo hacia mirándolo y cuando el estaba desprevenido
Comienza un domingo donde todos los amigos de colegio nos reuníamos para ir a jugar a la cancha y así cada uno contarnos las nuevas nuevas que tenían ya que ya habíamos egresado del bachillerato, recuerdo que eran como las tres de la tarde donde con mi novio nos dirigíamos hacia la cancha para el acostumbrado día de deporte con los chicos yo ya sabia que Mauricio iba a estar allí porque además de ser el mejor amigo de mi novio era también compañero de curso de los dos.
Yo quería verlo y quería b...