De como un vídeo porno unió a la familia.
Y así es como un hijo muy adicto al porno acaba follando con su familia tras una larga sesión de pajas. mM/F, sin sexo gay, sólo morbo entre hombres.
Carlos cerró la puerta de su habitación y miró a su mujer, Lucía. Su hijo Lucas, a sus 18 años, llevaba tres días oyendo porno y pajeándose desde que entraba en casa de la universidad en la que estudiaba Derecho hasta bien entrada la madrugada, saliendo solo para ir al gimnasio a media tarde y pegarse un buen atracón en algún restaurante. Y no era discreto precisamente, ya que los gemidos de las pelis que veía se podían escuchar desde fuera de su chalet a las afueras de Madrid. Ambos eran altos administrati...