Pabellón de suboficiales (revisado)
Las piernas abiertas dejaban ver un escroto completamente relajado donde uno de los testículos sobresalía cubierto por la fina piel.
PABELLÓN DE SUBOFICIALES.
La primera vez que le vi fue al volver de mi permiso de Navidad, me impresionó su físico, era todo músculo, el anodino uniforme del Aire apenas podía disimular tanta humanidad, un tiarrón de unos 25 o 30 años, barba cerrada, mentón pronunciado, ojos verde grisaceos, corte de pelo muy apurado, más de lo que exigían las ordenanzas. A esa hora de la tarde su barba podría haber producido más de una erosión, de cerrada y dura que parecía. Allí estaba; fumando al final de la...