Puedo Ser de 3

De como una cita de la vida real con un cyberamigo me convirtio en la esclava sexual de sus amigos...

Estaba un poco aburrida, así que me decidí a entrar a una sala de chat para sacudirme la perece, en eso que me habla un chico y me dice quieres participar en una orgía, yo por supuesto le conteste que no, que como iba yo a hacer eso; pero pronto cambie de opinión

Miguel se llamaba aquel muchacho que me convenció de hacer aquello por lo que jamás creí que pasaría.

Seguimos frecuentándonos en el chat, vivíamos en la misma ciudad, así que su insistencia de que fuera a visitarlo a su casa (viví...