Nuestro primer Intercambio
Al principio fueron preguntas, cada vez más subidas de tono, de ahí pasamos a ir apostando nuestras prendas de vestir hasta quedar los cuatro totalmente desnudos y terminamos con las temibles penitencias.
Nuestro Primer Intercambio
Ya llevábamos saliendo algún tiempo con Pilar, saliendo es un decir, nuestra relación se limitaba a furtivas escapadas de la oficina a un motel o a cualquier otro lugar donde pudiéramos dar rienda suelta a nuestros deseos, a nuestras ganas de placer.
Habíamos hablado de nuestros respectivos intentos por ampliar horizontes sexuales: ella me contó que su esposo una sola vez le habló sobre su fantasía de hacer un trío, pero no pasó de una conversación caliente; por m...