Lasciva imaginación (Primera parte de dos)
Relato erótico de la fantasía de una pupila por su maestro.
Los cielos se oscurecen, se tiñen del rojo atardecer. Las sombras de la habitación se van alargando hasta que mi figura es la única que queda iluminada en el ventanal de hierro, piedra y cristal rajado y sucio de aquella habitación.
Mi mirada contempla expectante el camino aguardando su llegada... se que está próxima. Cada poro de mi piel, cada célula vibra sabiéndolo.
Aguardo tu llegada, mi maestro desde hace días... ¿Dónde estás?. He hecho lo que me has pedido, durante tus años de ausencia...¿...