Acampada

Un grupo de amigos huyen de la monotonía diaria y se van al campo. La noche y sus juegos derivan en una excitante orgia.

Mi relato ocurrió hace unos tres meses, justo dos días antes de mi cumpleaños; yo tenia aún los dieciocho, y mis amigos oscilaban entre los diecisiete y los veinte.

Todo empezó una tarde de sábado, cuando estábamos todos aburridísimos en uno de los bancos del patio del instituto, donde desde hacia tiempo nos reuníamos a partir de las cuatro de la tarde.

Solíamos ser unos cuantos, pero los asiduos éramos nueve: tres parejas (entre ellas yo y mi novia ), dos chicas y un chico.

Nunca sabíamos...