Trabajaba en su depto. (1)
Quedé obsorta desde que la vi, sin saber en qué trabajaba. Es que era una diosa y no pude dejar de pensar en ella.
Trabajaba en su departamento.
Capítulo I
Es exquisita. Desde que llegó al departamento de enfrente no puedo apartar los ojos de ella. De su cara, de su pelo negro azabache, sus ojos verdes, su figura de sirena, cómo luce sus bluejeans, su trasero exuberante, el cierre ajustado a su cadera mínima, levemente abultado por delante y dejando un orificio casi imperceptible de aire entre sus piernas. Simplemente fabulosa.
Yo vivo sola en mi pequeño habitáculo, donde apenas llego a dormir por...