Puta-sumisa 3
Por fin senti la leche escurrir por mis hoyos.
No habían pasado ni 6 minutos desde que subimos a aquel taxi, cuando mi amo me ordeno que le hiciera una mamada. No le hice esperar, desabroche su pantalón y engullí su pene; lo metía hasta lo mas profundo de mi garganta, mi saliva empezó a cubrir toda la longitud de ese pedazo de carne.
-ya llegamos señor.- dijo el taxista
-bájate zorra.- me dijo tomándome de mi cabello, logrando que su verga saliera de mi boca.
Nos bajamos del auto e inmediatamente mi amo me puso sobre la cajuela d...