Yo era un tierno infante

Relato de mi primera masturbación compartida con un primo mío en vacaciones de verano.

MI PRIMERA EXPERIENCIA

Yo era un tierno infante. 14 años.

En el internado ya habíamos tenido nuestras primeras experiencias en el descubrimiento de que al “chisme de mear” se le podía sacar algo más de partido. Tampoco sabíamos muy bien el qué y el cómo hacerlo, pero… era un descubrimiento.

En el verano, en vacaciones un primo mío, mayor que yo, 16 años, vino a pasar unos días al pueblo con nosotros. Todos los días nos acostábamos la siesta por prescripción familiar y lo que menos nos...