Una tarde de sueños realizados

La lectura de relatos eróticos, hacen revivir momentos de un estupendo sexo.

Eran las 12'30 de la noche, después de haber pasado toda la tarde tumbada en el sofá, mirando la televisión, pero no viéndola. Había estado con fiebre y era lo único que me apetecía hacer.

De pronto me vino a la cabeza que mi amante me había dicho que me iba a escribir un relato basado en nuestras experiencias con mi marido. Salí corriendo y  al abrir mi correo, allí estaba esperándome ese relato tan deseado.

Lo leí primero muy muy deprisa intentando engullir todas esas experiencias que fantasea...

Una tarde fantástica

Una tarde, un encuentro y después el placer de estar follando toda una tarde.

Bajé del coche , me puse bien la falda y me dirigí hacía el bar del complejo comercial donde habíamos quedado por teléfono.

Lo vi sentado en una de las mesas, su aspecto informal me gustaba, me excitaba. Llegué junto a él, y con una sonrisa, me invitó a sentarme. Cuando nos habíamos sentado, empezó a decirme cosas que me ponían caliente por momentos.

El ese día , estaba totalmente libre durante la tarde y la noche y yo podía dedicarle unas horas.

Me invitó a un café  y mientras lo tomaba ,...

Una tarde divertida

Esa tarde, que haciendo un trio, ves como disfrutamos todos los que jugamos.

Dos pares de manos acariciaban tu cuerpo bajo el edredón. Tu piel era suave y receptiva a las caricias como pocas veces recordabas. Sentías cada pasada, cada presión de los dedos, en tu espalda, en el interior de tus muslos, en cada zona sensible aunque, a decir verdad, toda tú sentías en cada parte donde te rozábamos.

Volviste tu cara hacia mí y me ofreciste tu boca. Nuestros labios se unieron y las lenguas comenzaron su danza, buscándose, peleando, rozándose entre sí y penetrando la boca del otro y...

Una tarde de juegos

Una tarde jugando con consoladores y haciendo un juego a tres perfecto.

Indudablemente el tacto era suave. Pero de tan realista resultaba extraño. Porque detrás estaba mi ano, no un cuerpo. Y delante tus muslos abiertos...

Su tamaño no era grande, al menos en comparación con los monstruos que se exhibían en las estanterías de la sex shop donde te lo compré. Pero quién necesitaba esos apéndices estrafalarios. Lo que yo, lo que tú también querías, era una sesión con un consolador que te llevara a tocar el cielo. Y, como bromeé contigo al sacarlo de la caja, no por ir con un...

Una tarde con mi amante

La mujer pasa la tarde con su amante y hace que su marido disfrute viendola por el móvil.

El tanga era diminuto. Pero tenía el inconfundible olor de mi mujer y una generosa manchita de su flujo en medio de la tela de la entrepierna.

Cuando la dejé en la puerta de la casa de nuestro amigo ella estaba nerviosa, excitada y muy caliente, en una mezcla explosiva. Apenas habló durante el camino, pero no dejaba de moverse en el asiento, haciendo girar levemente sus caderas y rozando al descuido sus pezones por encima de la seda de su blusa. No llevaba sujetador y se perfilaban nitidamente a travé...

Una tarde como sumisa

Jugando a los trios entre una mujer, su marido y un amigo.El amigo,trata a la mujer como su sumisa,haciendo ella todo lo que el le pide.

Habíamos quedado aquella tarde con un amigo en casa. Yo, me atrasé en la oficina y mi mujer me llamó para indicarme que nuestro amigo, había llegado y que

me iban a esperar tomando una copa, les dije que no, que empezaran sin mi. A la media hora, llegué a casa y al abrir la puerta, lo primero que vi, fue

a mi mujer con las piernas muy abiertas y desnuda de cintura para abajo. Sus tacones apoyados sobre la mesa , hacían que la imagen de sus largas y

delgadas piernas ,fuera muy sensual. Nues...