Visitando el mirador
Acerca su cara a mi lateral derecho, coge mi mano derecha con la suya, la mueve en la dirección que antes señalaba con la suya, y me marca el recorrido que tengo que hacer con la mirada. Sentir su respirar en el cuello, su voz susurrante en mi oreja derecha, no puedo evitar el escalofrío
- Cuando quieras ven que te muestro la casa y las vistas que tenemos del valle desde nuestro mirador.
Es una oferta que no puedo rechazar, conocer la casa que se ha comprado Javier con su mujer, que tiene una de las mejores vistas del valle que se pueden tener. Con amplias miradas a la montaña, en plena naturaleza, rodeado de naturaleza y silencio. Pues sí, me apetece ir a conocerla, así que quedo con Javier para visitarlos, echar un rato de conversación y conocer las vistas.
Cuando llego me recib...