Deja que te coma el tigre

Y de pronto me devolvio la vida que se me habia ido tras el amor de mi vida

Ya había pasado un año y medio desde la muerte de Alex, muchas cosas habían cambiado desde entonces, yo seguía viviendo en el departamento que hasta el ultimo día compartí con el, había terminado mi carrera, seguía trabajando mas por mantenerme ocupada que por necesidad, y claro, también por prescripción medica del psicólogo que me había recomendado mi amiga Adriana después de lo sucedido con mi prometido.

Ya tenia un par de meses buscando una opción para cambiar de trabajo, en la casa de inversión do...

La boda de mi mejor amigo

Forever, forever, you'll stay in my heart

Forever, forever, you'll stay in my heart

and I will love you

Forever, forever, we never will part

Oh, how I'll love you

Together, together, that's how it must be

To live without you

Would only be heartbreak for me.

“I say a little prayer”

Compositores:Burt Bacharach y Hal David

Estaban ahí, en una mesa cercana a la barra del restaurante, se reían copiosamente mientras compartían la comida de la parrillada para dos y chocaban sus copas.

  • Salud, por...

Alejandro, un amor verdadero

Tranquila, no pretendo salir de aquí contigo a mi departamento a hacerte el amor, aunque muero de ganas por que eso pase, pero esto no será así, te quiero enamorar, despacio, con detalles, atenciones, que poco a poco me convierta en el hombre de tu vida

ANTES DE COMENZAR ESTE RELATO, UNA DISCULPA, LO HE PUBLICADO DE NUEVO YA QUE LA PRIMERA OCACIÓN POR ERROR OMITI GRAN PARTE DEL MISMO Y NO ME HABIA DADO CUENTA, AHORA SI, YA CON EL RELATO COMPLETO, ESPERO QUE LES GUSTE.

Era una de esas noches tempranas a la salida de la escuela, mis amigas y yo platicábamos en el patio, esperando ese momento en que se nos acababa la inspiración para seguir una conversación entre siete.

El chismorreo de siempre, que si el chico de tal clase, que si el amor platóni...

El pasado hay que enterrarlo 4... final

Sergio la miraba como un niño regañado, sin sostenerle la mirada, con los hombros encogidos y la cabeza baja. Afuera la lluvia parecía arreciar, el cielo cada vez se ponía más negro y solamente los relámpagos alumbraban el exterior.

Intento cerrar la puerta, pero no pudo, Sergio se lo impedía con el pie, siempre fue mas fuerte que ella, alto, de espaldas anchas con piernas y brazos fornidos, que podía hacer Isabel contra el, nada, además, el factor sorpresa, la impresión, lucho y lucho, pero fue en vano, se dio por vencida y dejo de forcejear.

  • ¿Qué demonios haces aquí?
  • Isabel, mi amor, vine a verte, a pedirte perdón, ¿Dónde esta la niña?

Una mirada de rabia y una cacheta que lo tambaleo, lo hicieron retroceder el par de pas...

El pasado hay que enterrarlo 3

Se quedo con los ojos cerrados un momento, respirando profundo, tratando de recuperar el ánimo de seguir con la tarea que se había propuesto.

Se despertó y vio a Federico a su lado, dormido tranquilamente, se levanto despacio para no despertarlo y se puso su camisa. Era temprano, quizá las 7:30 AM, se asomo por la ventana, poca gente en las calles, en parte por que era sábado y temprano, en parte por que parecía que la lluvia no pensaba irse en todo el fin de semana. Cerró los ojos por un momento para escuchar los sonidos de la mañana, cuando de pronto sintió el cuerpo de Federico detrás de ella, abrazándola.

  • Buenos días hermosa.
  • Buenos d...

El pasado hay que enterrarlo 2

Subieron por el elevador, de nuevo el edificio vacío, las miradas largas, los dedos de las manos apenas rozándose y las sonrisas congeladas en los labios.

La despertó el frío, y la soledad, eran las seis de la mañana cuando Isabel abrió sus ojos y las luces de la ciudad la sorprendieron ahí, acurrucada sobre la alfombra frente a la ventana. Afuera la lluvia aun caía, pero sin la intensidad de la tormenta de  la noche anterior, sino como apenas una brisa, sin embargo, los efectos en el clima estaban consumados y no se esperaba un día calido, tal vez y si había suerte, un poco de tibieza.

Se levanto con dificultad, tenia el cuerpo entumecido por el frío y...

El pasado hay que enterrarlo 1

Isabel seguía inmóvil frente a su ventana, los ojos anegados de lagrimas, el dolor del abandono clavado muy dentro del alma y ese sentimiento extraño de que algo pasaría, algo que irremediablemente la pondría de nuevo frente a aquel pasado que deseaba se muriera, pero al que la ataban aun muchas cosas.

Ahí estaba Isabel, sentada en el escritorio de su oficina, terminando algunos pendientes para salir rumbo a la casa de sus padres para llevarlos a ellos y su pequeña de cinco años al aeropuerto, su vida había cambiado radicalmente en los últimos seis años, ya no vivía en el pequeño departamento que había ocupado por tres años y ya no era empleada, ahora tenia una microempresa en la que compartía sociedad con uno de sus profesores de la carrera, era madre soltera y, a decir verdad, a sus 29 años estaba...

Alfredo (2)

Despues de siete meses de noviazgo, por fin nos entregamos al placer

La lluvia no daba tregua afuera y el frío cada vez era mas intenso, el calor de nuestros cuerpos no fue suficiente para evitar un ligero temblor en mí que Alfredo percibió, así que como pudo jalo las cobijas y nos cubrió a los dos, yo me acurruque en su pecho y seguí dormida abrazándolo.

De pronto un relámpago acompañado de un trueno enérgico nos despertó, yo alcance mi celular sobre la mesa de noche, lo encendí y vi la hora, las 1:00 AM, bien, ya habían pasado varias horas desde que habíamos lle...

Alfredo (1)

Despues de siete meses de noviazgo, por fin nos entregamos al placer

Esa tarde lluviosa de agosto estaba yo esperando el autobús afuera de la empresa para la cual en aquel entonces prestaba mis servicios como practicante universitaria y ahí estaba mojándome con lo que parecía una fuerte brisa.

Ese día vestía jeans azules, una blusa negra de manga larga y cuello de tortuga, botas negras de tacón alto, bolsa negra de medio círculo grande donde llevaba artículos personales y de escuela, un abrigo gris Oxford y una gorra tejida tipo boina en el mismo tono complementa...

Una noche en la playa

La historia de un amor de vación

Estábamos en Vallarta, mis amigas y yo, un 11 de diciembre, en el barquito que apenas pones un pie en Vallarta te dicen que si no te subes no fuiste a Vallarta para nosotras ya era como la 3º vez que nos subíamos, bueno, estábamos en la parte de arriba, brindando con tequilas Sunrise, si algo nos gusta a mis amigas y a mi es el tequila, y eso en parte es culpa mía.

Brindábamos por el viaje cundo se acerco un chico a la parte donde estábamos nosotras, era alto, no muy delgado pero su cuerpo se veí...