Cruising en la playa

Relato anónimo, de cómo me hicieron plantearme mi sexualidad tal y como la conocía, una tarde de julio.

La posteridad no necesita sabre mi nombre, ni mi edad concreta. Solo narro este relato para liberarme, y para haceros partícipes de lo que sin duda fue una de las tardes más mágicas de mi juventud. No ocurrió hace más de tres o cuatro años, cuando tenía poco más de veinte.

Acababa de romper con mi primera pareja. Una chica linda, nada de despampanante pero que me había ayudado a entender muchas cosas sobre mí mismo, en muchos aspectos de la vida, pero un sin miedo a equivocarme puedo afirmar que no er...