Elvira, nuestra sirvienta mulata (1)

Se quitó la tanga, se abrió de piernas, y se empezó a meter un dedo en su cosita bonita...

Elvira, nuestra sirvienta mulata (1).

Esta es mi segunda historia e igual que la primera (Verónica, la maestra del amor), es totalmente cierta.

Mi mamá se había acostumbrado a tener sirvienta en nuestra casa, debido a que se iba atrabajar en las tardes, se aburría mucho estando en casa.

Habían pasado por la casa diversas muchachas, todas feas.

Le recomendaron a una sirvienta nueva, la conocí cuando regresé del trabajo, en ese entonces, yo tenía 32 años. Cuando entré a la sala, m...

Verónica, la maestra del amor

Verónica y yo trabajamos en la misma escuela, mis recuerdos y experiencias con ella.

Verónica, la maestra del amor.

La historia que les narro es 100% cierta. Soy profesor en una secundaria técnica en México. Me llamo Mario.

Cuando Verónica llegó a la escuela, tenía 35 años, tenía dos hijos pequeños.

Es de piel blanca, cabello ondulado a los hombros, ojos claros, nariz un poco aguileña, labios carnosos que se antoja besar miles de veces. En resumen, una cara bonita.

Mide como 1.65 m. de estatura, tiene cuerpo de mujer, caderas un poco caídas por los partos, p...