Una tarde con mi amo
Allí estábamos los dos, en esa barra del bar. Un bar oscuro, lleno de gente, con un ligero olor a rancio. La media de edad que nos rodeaba rondaba los treinta y...
Yo vestía unos vaqueros finos y bien ajustados de color azul claro, una camisa larga que alcanzaba el medio muslo y unas botas de tacón, ambos de color caqui. La blusa era holgada, amplía pero a la vez, resaltaba mi figura, tenía un ligero tono trasparente que con el exceso de luz dejaba traslucir el sujetador de media copa que me había regalado el, mi amo, a juego con el culot. Por último, y como prenda indispensable estaba aquel precioso collar que rodeaba mi cuello, era negro de cuero con pequeños adorno...