El coño de V.
Nos conocemos desde hace treinta años, pero cuando nos vemos por la calle apenas nos saludamos. Hasta un día en el supermercado...
—Tienes ticket del parking —oigo que pregunta la cajera.
—Que va —contesta Victoria—, me he venido sin coche y ahora no sé dónde voy a meter todo esto.
—Si te esperas a que pague, te lo llevo —intervengo yo desde detrás de la cola.
Victoria se vuelve y busca con la mirada. Al verme se le iluminan los ojos, sonríe y hace un gesto con la cabeza, asintiendo.
Cinco minutos después —nuestras compras en mi maletero, ella a mi lado— voy siguiendo las instrucciones que me da para lle...