Mónica (10: El Secreto)

Mónica (10: El Secreto)...

Esta vez era evidente donde las llevaba. Aparcó el coche ante un rótulo de "billares", que presidía una puerta de entrada, amenazadoramente abierta. Mónica fijó la mirada en las escaleras que bajaban hacía un sótano, como si fuesen en realidad el descenso de un nuevo nivel de círculos concéntricos dantescos. Se preguntaba cuando llegaría el final y si, al terminar, sería capaz, como el protagonista de la obra, de ascenderlos nuevamente. Y se preguntaba si, de hecho, importaba lo más mínimo. Viendo a ...

Mónica (09: El Espectáculo)

Mónica (09: El Espectáculo)...

No vio a Ester ni a Sergi durante todo el día. A pesar de que se había levantado tarde, tras el episodio de la discoteca, se le hizo largo estar tanto rato sin ellos. Deambulaba nerviosa por el apartamento, sin apartar la vista del balcón por si los veía aparecer. Ese tiempo le sirvió para confirmar su nueva dependencia. Necesitaba a Sergi, sus órdenes... Ansiaba sentir nuevamente la excitación que le producía la humillación constante a que la sometía. Pasó la tarde desnuda en el piso, esperando... Qu...

Mónica (08: El Dinero)

Mónica (08: El Dinero)...

Mònica aprovechaba los últimos rayos de sol de la mañana. Tendida en la playa como un lagarto las horas pasaron rápidas. Había aprovechado el momento en que Sergi se adentró en el agua para hablar con Ester por primera vez. Las palabras salían a borbotones de su cabeza. Lo que sentía, cómo se encontraba. Quería saber, entender... Todo lo que Ester le dijo fue – No tengas miedo. – con una voz suave, sonriéndola con la mirada. Fue como un bálsamo para Mònica. Se limitó a tenderse, con la cabeza sobre el...

Mónica (07: La comunión)

Mónica (07: La comunión)...

Al día siguiente se levantó tarde. Se había pasado toda la noche masturbándose imaginando a Sergi y sus amigos la noche anterior. De hecho, la despertó la luz del día. Se duchó, desayunó, y se dirigió al comedor para recoger las copas de la noche anterior. Sobre la mesa de mármol, entre los vasos, una mancha espesa, blanca. Acercó los dedos, temblorosa, y dejó que el semen se deslizara entre sus dedos, apreciando la textura, como si fuese un tejido. No pudo reprimirse y acercó los dedos a la mejilla,...

Mónica (06: El Castigo)

Mónica (06: El Castigo)...

Mònica no podía quitarse de la cabeza lo que acababa de hacer y prácticamente no se dió cuenta de nada hasta que llegaron a un club. Era la típica discoteca de costa, abarrotada de veraneantes, principalmente extranjeros. Sergi la condujo hasta la barra. Ella se sentó, sin olvidar que no llevaba braguitas (ahora guardadas en el bolsillo de él), y que la falda casi no la tapaba. Cruzó las piernas, decorosamente, pero el efecto era espectacular, largas y morenas, luciendo en todo su esplendor. Las palab...

Mónica (05: El Juego)

Él toma la iniciativa, dominando la voluntad de ella. La lleva a una tienda donde le compra la ropa que desea que lleve y luego a un restaurante donde ocurrirá algo imprevisto, increíble...

Hacía las nueve de la tarde llamaron al timbre. Mònica se levantó como un resorte y se dispuso a abrir. Llevaba aún la misma falda y camisa rota de la tarde. Sergi la abrazó, apretándola fuertemente, agarrándole las nalgas, sin más. - Dame las llaves de tu casa - Sin pensarlo, las cogió del bolso y se las entregó. - Ahora vámonos.

  • ¿Qué quieres que me ponga? - preguntó Mònica, sin saber dónde iban. Otra vez la mirada de Sergi denotaba indiferencia al responder: - De hecho, da igual.

Temerosa de...

Mónica (04: La Respuesta)

Nuestra protagonista y su vecino, su nuevo y excitante amigo, están comiendo juntos en casa de ella. Y llega el momento en que él intenta besarla y acariciar su cuerpo. Los acontecimientos se precipitan y toman un giro inesperado.

Al terminar de comer, Mònica aprovechó al pasar por delante del ventanal del comedor para demorarse un momento, simulando que miraba hacía fuera, mientras dejaba que la claridad transparentase sus piernas al contraluz. Estaba segura de que no se perdería detalle y esta maniobra de provocación la excitaba. Sergi se levantó y, educadamente, se ofreció para retirar la mesa, en tanto que ella se sentaba a esperarlo. Apareció con dos copas de coñac en la mano y se sentó a su lado.

Le alargó la copa y esper...

Mónica (03: El Tanteo)

Acompañada por su nuevo amigo nuestra protagonista va a un a playa que resulta ser nudista. Ella experimenta nuevas sensaciones al sentir el cuerpo desnudo de él rozando su piel.

Se levantó muy temprano. Ya hacía rato que intentaba decidir qué se pondría esa mañana para ir a la playa. Estaba agitada como cuando era adolescente. Definitivamente, un bikini pequeño, sin exagerar, y un pareo envolviéndola. Se esforzaba en tener remordimientos por el hecho de ir con un hombre casado a la playa, buscando una excusa para dejarlo correr, pero no lo conseguía. Al fin y al cabo no había pasado ni tenía que pasar nada.

Cuando llegó al aparcamiento él ya la esperaba. Sólo un beso en la me...

Mónica (01: El Descubrimiento)

Una mujer, separada hace meses, sola en su apartamento en una tarde de verano. Semi desnuda, caliente, y con un vecino en la terraza de enfrente que no pierde detalle de su espléndido cuerpo.

I.- El descubrimiento

Se encontraba todavía en ese estado de semivigilia tan dulce, con el sol calentándole la cara, justo saliendo del sueño de una tarde de verano. Sentía aquella sensación de tranquilidad al despertarse de una siesta de vacaciones, sabiendo que no había prisa por desperezarse. Se estiraba poco a poco, con el libro todavía sobre las piernas desnudas.

Hacia rato ya que yacía en la silla, en la terraza del apartamento que había alquilado. Se sentía libre. En sus treinta años, era...

Mónica (02: La Confirmación)

La mujer sale a pasear por el pueblo y se encuentra a su vecino, con la mujer y los niños. Conscientemente se remanga el vestido para excitarle...

Con el recuerdo de lo que había pasado en la terraza fue oscureciéndose la tarde.

Mónica dormitó un rato más y, cuando el calor ya se le pegaba a la piel, se despertó. Tenía la noche por delante y intentó tranquilizarse. Se duchó lentamente, reprimiéndose las ganas de acariciarse... Era curioso. No había sido nunca una persona de sexualidad compulsiva, pero el episodio que había protagonizado hacía un rato parecía haberle descubierto un mundo nuevo de sensaciones.

Tal vez por eso sentía el deseo...