Recordando las normas

Los minutos pasaban y comenzaban a dormírsele las piernas, las rodillas le dolían y se moría de frío. La ventana estaba abierta para que se fuese el humo de los cigarrillos y ella tenía la piel erizada. Lo miró, planteándose si ya se le habría pasado el cabreo. Tecleaba algo en el portátil mientras daba pequeños sorbos al whisky. No la había mirado ni una sola vez.

Alejandra estaba paralizada. Parada allí de pie, en mitad de una concurrida calle comercial, sentía que todos los ojos se clavaban en ella. Estaba experimentando esa sensación de irrealidad que nos sobreviene a todos cuando algo negativo ocurre de forma súbita, inesperada, atenazante. Esa sensación de estar viéndonos desde fuera, mientras el entorno empieza a girar.

Trató de respirar hondo y recapitular los últimos minutos, tratando de comprender...

*** Se encontraba en una tienda, su novio deam...

Tu lugar está dos pasos por detrás

De pronto notó la aspereza del cuero ciñéndose alrededor de su cuello y un tirón la hizo caer de la cama desprendiéndola de la toalla y dejándola completamente desnuda. Él desabrochó la cremallera de su pantalón dejando a la vista un enorme pene que se erguía amenazadoramente ante sus ojos.

Era una mañana de Agosto en un pueblo costero del sur de España. El sol bañaba el paseo marítimo dándole a todo ese tono de luz tan propio de los pueblos de Andalucía, pero a la vez calentando sin tregua y haciendo difícil incluso pasear por las empedradas calles.

El minúsculo vestido de tela fina que ella llevaba se le pegaba al cuerpo debido al sudor, mientras la parte de abajo ondeaba movida por la leve brisa, dejando entrever unos generosos y firmes glúteos.

Él la observó al tiempo que camin...

Reconciliación: MÍA.

Esta es una historia real y por tanto, merece ser contada en condiciones. Ligera dominación masculina. Los polvos de reconciliación, siempre han sido los mejores ;) "Estaba disfrutando como una zorra, bajaba la cabeza y le lamía los huevos con dedicación para luego volver a tragarse su polla.."

Hacía 8 meses que no se veían.

Por aquel entonces él solo tenía interés en su coche, sus amigos, copas y mujeres; y tener que atender a una novia comenzaba a ser una molestia.

Ella, cada vez que veía en el espejo su increíble cuerpo de 20 años, se preguntaba qué hacía mendigando las caricias de un desgraciado.

Así, cansada y harta, decidió pedirle un tiempo y él hizo lo necesario para que ese tiempo se convirtiese, en pocos días, en una ruptura definitiva.

Pero ahí estaban de nuevo,...

Aprendiendo

Este es un relato totalmente real. Soy una chica joven, morena, de ojos verdes y buenas curvas que tiene una relación un tanto especial con su novio. Nunca hablamos de desempeñar los roles de Amo/sumisa pero hemos acabado en ello de manera espontánea y ahora no me veo sino en ese papel.

Ella sale de la ducha, envuelta en esa diminuta toalla blanca y con su larga melena negra goteando sobre su espalda, y se dirige hacia el salón.

Él fuma un cigarrillo mientras ve un programa en la televisión ataviado únicamente con unos gastados vaqueros.

Ella se le acerca sonriente y sin mediar palabra se sube a horcajadas sobre él y comienza a besarle el cuello.

- Baja de ahí, que te vas a poner como una perra en celo y me vas a manchar el pantalón – dice él sin apartar la vista del...