Me cansé de ser virgen- Parte 3
Ya pasaron seis meses desde que me desvirgó mí concerje y empecé a vivir ni sexualidad libremente. Pero cuando creía que ya tenía completo dominio sobre los hombres un taxista me humilla de la peor manera.
Pasaron ya seis meses desde que me mudé de ciudad y desde que Rubén, el encargado del edificio, me desvirgara. En ese tiempo fui aprendiendo cómo tentar machos, cosa que no era tan difícil como creía cuando llegué.
Casi todas las noches me ponía algún vestido corto o escotado, o ambos y salía a bares en busca de verga. A veces la encontraba antes de llegar, hay muchos taxistas y choferes de Uber quienes me terminaron dando el viaje gratis. Me encantaba cuando los encontraba mirándome las piernas des...