Dominado por maduro (Parte V: Conclusiones)
Un macho maduro desconocido termina por convertirme en su puta. El final de la historia.
La cena continuó como una fantasía hecha realidad. Él me miraba y me acariciaba la cabeza cada cierto tiempo y me decía cosas sucias de rato en rato. Comimos bastante rápido la verdad, tal vez no hablamos mucho pero si incrementamos nuestra cercanía con caricias y besos silenciosos. Él a veces me tocaba el sostén y los pezones haciéndome comentarios como "tetas de putita", "te queda muy bien", "te ves bien puta" y yo me sentía más excitado cada vez que me trataba así. En medio de la cena yo le había contado...