La Leona I
Una noche de fiesta por la capital, un garito, una mirada. Las dos mujeres se encontraron la noche adecuada en el momento preciso.
Sara se terminaba el ligero maquillaje, se acomodaba el pelo en un tupé y se miró por última vez en el espejo. Era la segunda vez que salía de fiesta por la capital, y la primera en un bar de ambiente gay. Llevaba unas zapatillas a juego con los pantalones ajustados. ¿Iba poco arreglada? ¿Debería vestirse mejor? Apenas le quedaba tiempo para ser puntual, y llegar tarde no le gustaba. Era un pequeño defecto que tenía. Cuando logró aparcar, sus amigas le señalaban el reloj de su muñeca, llevaban diez minutos...