El Diario de Miriam (9)
Le mostré a mi hijo lo que quería: un cuerpo de mujer, el cuerpo de su madre, completamente desnuda...
El Diario de Miriam ( 9 )
Creo que desperté hora u hora y media después. Me envolví en una toalla y salí de mi cuarto, al baño, a ducharme. Y de golpe cayó sobre mi mente la conciencia de todo lo ocurrido: me había estado masturbando como una loca, desaforadamente, y aunque quisiera negarlo o encontrara excusas y paliativos, la verdad era que lo que me había excitado era la conversación con mi hijo Oscar, y su curiosidad por el sexo, y su atracción por su madre, y el pacto que habíamos hecho...