El masaje

Un inocente masaje de espalda se convierte en un excitante viaje de placer.

El llegó a su casa pasada la medianoche, el día había sido caluroso y ella lo recibió con un pijama de seda verde que hacía juego con sus brillantes ojos color aceituna.

Pantalón corto que dejaba ver sus preciosas y torneadas piernas bronceadas tras los primeros días de playa y camiseta de finos tirantes bajo la cual se adivinaban sus voluptuosos y turgentes pechos.

Iria medía poco más de 1´70, cabellera rubia de pelo liso y sus ya comentados ojos  verdosos se veían acompañados por una gran sonr...

Iria y el pago en especies

De como una pequeña reparación se convierte en el mejor cunnilingus jamás realizado por mi parte.

Iria y el pago en especies.

Ella quería que alguien le echase una mano con el ordenador y con esa excusa llevábamos unos días hablando y tonteando por wassap. Al fin un día fue necesario que me pasase por su casa y quedamos para última hora del día al salir del trabajo.

Insistía en que debería cobrarle la visita y el trabajo, yo insistía aprovechando las picaditas del wassap en que si me recibía con un bonito camisón me daba por cobrado, pero ella por toda respuesta siempre me dejaba un emot...