Recuerdos no tan lejanos

Una historia real de una experiencia de iniciacion al travestismo.

No era tan joven cuando, por un problema circunstancial, debí recurrir a un masajista durante una corta estadía en Mendoza. No conociendo a nadie para solucionar un dolor en una pierna, producto de una torcedura, busqué en un diario local y encontré el aviso de este profesional, al que llame de inmediato y acordé una cita para la tarde.

Al llegar al consultorio, la persona, de edad mediana y algo gordito, me recibió, y lo primero que me dijo y que me llamó la atención fue: ***"¡Hola, ¿qué tal?.....