Albert, el albañil
Volando con mis sensaciones me dejo llevar por esas manos ásperas.
Albert, el albañil
Era urgente hacer una construcción en casa... mi mamá me recomendó unos albañiles que trabajaron unos días en la casa del lado... los llamé para pedir presupuesto y la persona que vino tenía muy buen aspecto, para nada se asemejaba a los albañiles que generalmente uno suele ver.
Una persona bien vestida, de buena dicción, inteligente y de físico agradable. Debía tener cerca de 40 años... me gustó su aspecto y por eso lo contraté. Mi marido me dijo que ese no es el motivo...