Bendito calor

Cuando el calor interno es más fuerte que el verano.

Por fin estamos en tu casa.

Tanto tiempo trabajando juntos, compartiendo horas uno junto al otro y hasta hoy no sabía como era el sitio donde vivías. Siento en mi interior como crece el deseo. Siempre me pasa cuando te miro, eres hermosa y lo sabes, te arreglas y luces tu cuerpo y tu rostro. Pero sobre todo me atrae tu vitalidad, esa sensación de vida irrefrenable que bulle dentro de ti, la forma en que conviertes una tarde de cansancio y lluvia en una ocasión para la risa y el juego. Sin embargo hoy...

Una noche cualquiera

Una noche casi cualquiera en que una pareja empieza a explorar algunos de sus deseos ocultos.

Estas desnuda sobre la cama, boca abajo, tienes los ojos vendados y las manos atadas al cabecero con pañuelos de seda. Voy acariciándote suave, muy suave, con otros pañuelos, pasándolos por tu espalda, rozando tu cuello y tus hombros. Cuando paso bajo tus brazos rozando tus sobacos no puedes evitar un escalofrió. Subes ligeramente el cuerpo y mis manos pasan bajo tus pechos, acarician tus pezones que se hinchan y aunque no quieres hacer ningún ruido se por tu forma de respirar que estás muy excitada. ...