Ibiza, mi mujer y el sátiro

...entonces alargué cuanto pude mis manos hasta tener abrazados los dos cuerpos: mi mujer en medio y el chico al que tenía agarrado por las nalgas empujándolo dentro de ella.

Ibiza, mi mujer y el sátiro

©Miguel Ysu. Misupa696@hotmail.com

Ocurrió el último día de julio, el último día de nuestra estancia en Ibiza y no pudo ser un colofón más excitante e imborrable a nuestras vacaciones...

Habíamos decidido que por primera vez íbamos a practicar el nudismo. Antes de emprender el viaje habíamos navegado por Internet buscando cual podía ser la playa más apropiada para esa práctica. Tras mucho leer en distintas web vimos que...

La noche de las estrellas fugaces

Los oigo gemir, jadear. El colchón, la cama, la habitación, todo se queja del sobreesfuerzo que generan las embestidas de Ernesto sobre Isabel. No se reprimen en absoluto. Deberían acordarse de que todas las ventanas están abiertas y que los vecinos pueden oírlos...

Esta narración está dedicada en primer lugar a mi esposa ya que sin su curiosidad y determinación no hubiera habido nada que contar. Además me siento en deuda con las treinta y dos personas que escribieron a misupa696@hotmail.com contestando al anuncio que publiqué en una web de contactos solicitando un caballero con clase y dotes de seductor para mi mujer. Como solo hubo un ganador a los restantes treinta y uno les doy las gracias por su interés y aquí tienen la opor...

De como llegué a cornudo

O mejor dicho: de como conseguí llegar a cornudo.

Bueno, en realidad el titulo correcto de este relato sería "De cómo conseguí llegar a cornudo". Si de joven alguien me hubiese propuesto compartir mi novia o esposa seguro que le habría costado algún moratón en la cara sin embargo en esta etapa de mi vida, ya en la cincuentena mi fantasía preferida era imaginar a mi mujercita follando con otro hombre mientras yo la observaba.

Cuando digo fantasía me refiero realmente a eso ya que la mentalidad de mi mujer no había evolucionado, o quizás sería má...