Antojo cumplido.

Una amiga me contó la experiencia del sexo oral con su novio, la verdad es que me antojo mucho...

Ahí estaba yo, en cuclillas, con la blusa desabotonada y las tetas de fuera, grandes y redondas, ofreciéndose. Mi boca, ocupada en lamer y lamer hambrienta de leche; era un falo divino, grande, grueso, bordado de venas exaltadas de excitación, yo seguía, paseando mi lengua de la base del pene al glande, allí me detenía y poniendo especial atención, succionadaba lentamente y escupia para luego metermelo todo a la boca y comenzar un viene y va, hasta topar a mi garganta y arquear de tenerlo tan dentro, lleno...

Unas deliciosas vacaciones

Un sitio alejado, un escenario de playa elementos perfectos para caer en las redes de la lujuria.

Algunas ocasiones durante temporada vacacional, pasaba los días en casa de mi tía Alma, es una zona muy bella para pasar el rato, disfrutar del sol, el mar y relajarse. Mi tía es una mujer madura, bastante guapa, robusta de piel morena y unos bonitos ojos miel, siempre traía un vestido con vuelo y se arreglaba muy sutil, con un par de aretitos brillosos y un labial color rosa, desde que tengo uso de razón lleva una larga trenza gruesa y oscura, era una mujer divertida e imponente.  Tiene una casa de playa q...

Disfruté por tener poquito dinero.

Una chica en medio aprietos financieros debe ceder un poco, ser cogida por su arrendador para solucionar su situación descubre cómo es que le gusta el sexo

Cuando era estudiante universitaria en Xalapa, Veracruz rentaba un departamento relativamente cerca de mi escuela, estaba ubicado en el centro, me quedaba muy bien porque la universidad no estaba tan lejos y en el centro podía tener todo a la mano. Era una calle bonita, empedrada y por las noches, cuando hacía frío se veía preciosa cubierta de neblina y una llovizna.

El sitio donde yo vivía era una puerta blanca, aparentemente sin mucho terreno, pero una vez adentro seguías el pasillo recorriendo un e...

Los ciberamigos

Una joven de 21 años, decide pasar el tiempo navegando en internet sin imaginar que podría encontrarse con un amigo muy compleciente

Todo comenzó una noche en que estaba aburrida, tomé entonces la computadora y navegue por internet durante horas; caí en un chat e hice muchos amigos, sin embargo, él era diferente, me atraía apenas con su plática acerca de su país. Se trataba de un hombre maduro -un abuelo de 60 años- yo apenas tenía 21 y estaba fascinada. Tuvimos muchas charlas a patir de entonces, me preguntó como era: Morena, estatura media, delgada, pelo largo obscuro, un trasero respingado y, no es por nada, pero mis senos son grandes...