María (IV: Horas extra)
Otra vez los compañeros de trabajo van a disfrutar de nuestra putita.
El trabajo se me había acumulado y tenía más remedio que quedarme para acabarlo. Alberto por la mañana me exigiría el informe de ventas y no quería darle motivos para castigarme. En la oficina solo quedamos cinco o seis personas. Los de control de producción que siempre acababan mas tarde, Loli de contabilidad y yo. Eran las ocho cuando por fin acabe el dichoso informe, solo me quedaba hacer unas fotocopias y ya podría irme a casa. Estaba reponiendo el papel en la fotocopiadora cuando unas manos agarraron m...