De cobra a anaconda.

Su culebrilla o cobra, para no minvarse la moral, sufrió un plantón, pero poco a poco nació una anaconda que le abrió todas las puertas o piernas.

  • Que no hombre! Que no quiero nada contigo!

  • Pero, pero... Si yo te quiero Paula.

Sus últimas palabras le destrozaron el corazón, pues ese día en la piscina creía que porfín caería presa de su amor. Pero no fue así, y eso no fue todo, su mejor amiga recibió al cabo de unos días ciertos rumores de que Paula andaba detrás de un chico que por lo que se contaba entre vestuarios tenía un poyón de campeonato. Las informaciones hablaban de 20cm erecto, otros de 25cm, pero al fin y al cabo era grande...

Andrea gana a Paula, sus pechos crecen.

¿Quién no ha soñado con vivir un crecimiento de los pechos, pene u otras partes eróticas de uno mismo o de su pareja? Aquí la historia de Andrea, una chica que casi se arruina en comprar sostenes.

Encendió la ducha y se dispuso a bañarse con agua caliente para olvidar ese malestar que le estaba matando. A pesar de la medicación que tomó durante toda la semana, Andrea seguía "pachucha", fiebres, dolores, etc. Su madre para quitarle hierro al asunto le decía que mirase la parte buena, y es que los adolescentes crecen cuando tienen fiebre (o eso se rumorea), lo que nadie sabia era que en este caso fue cierto.

Preparada para enjabonarse el cuerpo, miró hacia abajo cuando sus manos pasaron por sus p...