Sensaciones
Cuando me hacen gozar...
Marta y nuestra lujuria.
Me lo escribió Geraldin, y me éxito al recordarlo,
Noches de verano en Piriàpolis.
El soplo ardiente de la noche de verano penetra irremediablemente a hurtadillas por la ventana, entre visillos y cortinas. El suspiro cargado del cálido viento palpa la piel desnuda y agitada de dos cuerpos sudorosos, embebidos en un vaivén ardiente, rítmico y sobado del dormitorio. Un aroma se acopla a la brisa y copula arrastrado con ella, un tufo que mistura perfume,...