Complacencia
Aunque ya me había comido varias vergas sin que mi esposo supiera, esa noche lo complací, dejé que me cogieran delante de él.
Todo empezó hace varios meses, cuando mi esposo y yo estábamos cogiendo. Él me preguntó que si yo tenía fantasías sexuales y que cuáles eran, no me atreví a contarle y le hice la misma pregunta, y me dijo que tenía varios meses pensando que le gustaría ver como me cogía otro hombre; de momento me quedé atónita porque siempre había sido muy celoso y pensé que sólo me estaba tratando de sacar mis sueños eróticos. Pero continuó diciéndomelo en varias ocasiones, y yo también ya me imaginaba con alguien m...