Travesti, amante y esposa

De cómo pasé de ser un chico afeminado a una traviesita enamorada.

Mi nombre es Paula. Tengo 23 años y soy travesti. Me visto desde la adolescencia, y siempre fui pasivo. Nunca me gustaron las mujeres, y jamás salí con ellas. Siempre lo hice con hombres, y cumpliendo el rol pasivo. Soy de cuerpo chiquito, mido 1,60 y peso 50 kilos, encima tengo la voz finita y soy lampiño. Con esas características, más una piel muy suave, y modales femeninos siempre me resultó fácil pasar por mujer. En mi casa estuvo claro desde el principio que yo era marica. Yo era un chico de moda...

Mi amor Matías

De cómo el amor por mi prima me llevó a ser gay pasivo.

Hace un tiempo me entregué a una experiencia nueva: Una buena sesión de amor homosexual, que terminó en un noviazgo apasionado. Y no lo hice porque me gusten los hombres, sino por intentar llegar a la persona que admiro: Mi prima Natalia. En general admiro a todas las mujeres, y en secreto las envidio. Pero por Natalia siento algo especial. Ella es mi modelo de mujer. Y por parecerme a ella es que me entregué a otro hombre.

Me fascinó porque se llama Matías, igual que el novio de mi prima, y com...