Obsena situación
un marido que insinua a su esposa a jugar con sus sobrinos. y yo su mujer que entre en un juego sin retorno
Obscena situación estaba yo protagonizando.
Allí bailando casi desnuda frente a los dos sobrinos de mi marido, totalmente desinhibida mirada atentamente por los tres. Porque Jorge también estaba atento.
Ya mi marido se había quedado en calzoncillos, y manoseaba su cosa, induciendo a los chicos que hicieran los mismo.
No era que yo llegue y comencé ese baile por mi cuenta.
Mi marido se lo había prometido a sus sobrinos de 20 y 18 años. Me había convencido de que lo hiciera por ra...