LA MADRASTRA - Retrato de amor y deseos prohibidos
Marcella deja Brasil al casarse con Álvaro y regresar este a España. La vida con él es plena y feliz, pero un desgraciado acontecimiento hace que la cercanía con Diego, su hijastro, tome otros derroteros.
Marcella abrió la puerta del cuarto de su marido y se quedó inerte. Totalmente bloqueada. Sabía que debía hacer limpieza y recoger algunas cosas, pero no era capaz ni tan siquiera de atravesar ese umbral.
Su mente se fue al día, cuatro años atrás en que, feliz y a sus 48 años, cruzó de la mano de él el portalón de llegadas internacionales del aeropuerto de la que iba a ser su nueva ciudad.
Álvaro, de 60 años, tenía dos hijos, Diego de 34 en esa fecha y Pilar de 36.
Tras tres años de ausen...