Año nuevo, prima nueva...
El año que descubrí la debilidad de mi primita por el placer carnal, fue toda una revelación.
Mi prima se llama Paula. Esto que voy a contarles sucedió cuando ella tenía 16 años y yo 17. Teníamos una buena relación, éramos muy amigos desde pequeños, aunque nos veíamos poco (solo en las reuniones familiares) puesto que su casa no quedaba muy cerca de la mía. La describo: morena, alta de 1,68m más o menos, ojos marrón clarito, boca grande, muy bonita de cara la verdad. Un culito que sin ser perfecto estaba muy apetecible y un par de tetas dignas de ser tapa de Playboy. Sus tetas eran su fuerte,...