Un placer vendido
Un auto gris
Lo conocía hace varios años por internet, jamás nos juntamos en persona, pero hablábamos un montón, él me contaba sus intimidades y yo las mías, era un buen tipo, un poco vulgar para hablar pero alegre, siempre me hacia reír. Él nunca fue de mi tipo, un hombre de 1,70, tez blanca, ojos y pelo negro, no tenía barba ni bigote, siempre mantenía una contextura normal, no era delgado, pero tampoco gordo, no se ejercitaba, solo jugaba computador, en pocas palabras, era un tipo normal.
A pesar de que pasab...