En la playa con mi marido.

Mi marido era un hombre sin atractivo alguno, era feo, gordo y con micro pene, pero mi vida sexual con él fue más que satisfactoria. En este relato os muestro como una mujer puede disfrutar plenamente de su sexualidad con un hombre beta, esta vez, se trata de vivencias con mi marido en la playa.

Capítulo II (el capítulo I ya esta publicado, aunque no es necesario leerlo para entender este).

En la playa con mi marido

Mi marido definitivamente era un hombre patético, además de que su aspecto era anti lívido total, su inteligencia tampoco estaba muy desarrollada. Había tardado casi una década en sacarse su carrera de Derecho, que al final no le sirvió de nada porque acabó trabajando en el negocio de su padre, como era de esperar. Tenía unas rentas decentes gracias a que el negocio de su...

Yo, mi marido y el sexo

Mi marido, era un hombre eunuco, poco varonil, feo, y con un pene de risa, todo ello acompañado de una personalidad de hombre beta, no obstante, mi vida sexual con el no fue mala, de hecho, fue una de mis mejores etapas sexuales. Entra y averigua porque.

Mi marido es una basurilla patética con un pene ridículamente pequeño. Dicen que la naturaleza es perfecta, que no tiene fallos, pero resulta increíble que un hombre adulto, supuestamente diseñado para reproducirse, pueda tener una polla tan estúpidamente chica, es como un colgajo de piel que no tiene cuerpo alguno, un pene de recién nacido haría competencia al lado del de mi marido.

Cuando nos conocimos tardamos meses en hacer el amor, no es que él no quisiera, me lo pedía semana sí, semana no, como...