Ya, mamá... ¡contrólate por favor! (3)
Mamá se calma después del divorcio. Aparece el hombrón que nos vuelve locos.
YA, MAMÁ... ¡CONTRÓLATE POR FAVOR!- 3
El divorcio de mis padres cambió nuestras vidas. Mamá ya no dándole rienda suelta a sus disparates sexuales, a pesar de que ahora podía, con más confianza, desbocarse, pues ya no había quien la controlara. Lo que yo opinara al respecto la tenía francamente sin cuidado, pero ni así se aprovechó de la situación. Se tranquilizó y se dedicó a trabajar y a atenderme a mí. Sólo cambió su apariencia totalmente. Cambió de look radicalmente. Mejoró la calidad de su r...