Conchita chopeada

Una chica descubre que el panadero esta mejor que el pan de la panadería que ha visitado toda la vida

Esta historia pasó hace tiempo, cuando recién habían cambiado al viejo panadero que estuvo a cargo de la panadería del barrio, y antes de que lo cambiaran de nuevo

Era semana santa, todo mundo quería pan blanco para el bacalao y los romeritos, había filas en todas las panaderías de la ciudad y la nuestra no era la excepción, así que dejé encargadas las piezas de pan y me dijeron que regresara alrededor de las 6, faltaban unos minutos cuando entré de regreso, las cortinas de los ventanales estaba...

El lobo y la caperucita lila

Cuando las cosas iban fatales con mi ex decidí aceptar la invitación de un compañero y terminó en mi cama.

El lobo y la caperucita lila

Digámosle lobo, porque eso es, un hombre musculoso y con mucho vello, fuerte y suave, 30 años recién cumplidos unos días antes que yo, ojos almendra y labios de fuego que marcaron mi piel.

Trabajábamos juntos en un proyecto, nos teníamos que ver a diario y a veces le tocaba lidiar con mi mal carácter y mi frustración porque, el que era entonces mi novio, estaba demasiado ocupado para ir a verme al menos una vez a la semana, estaba atrapado por la política y tení...

De paseo por su piel (2)

La segunda parte de mi primer semana en Madrid... cuando descubrí muchas cosas que de él y de mi desconocía.

... Y como lo prometido es deuda, aquí hago la segunda entrega...

Comentaba que después de una tarde de delicioso esparicimiento me quedé profundamente dormida, así mi segundo día en Madrid empezó con un desayuno servido en la cama, que por el cambio de horario sentí como cena, empecé por pedirle que me sirviera el café y así lo hizo.

Cuando untaba la mermelada en mis tostadas, un poquito se resbaló hacia mi abdomen, ni tardo ni perezoso se acercó a mi y con la mirada más pícara que había...

De paseo por su piel

Iba a hacer estudios y terminé aprendiendo de la vida, de su piel y de mi habilidad para hacerlo felíz.

Como muchos de los escritores de relatos, a quienes agradezco la inspiración para enviar mi historia, empezaré por presentarme. Soy una mujer de 26 años, bajita, de piel tostada, "café con leche" dice mi familia, ojos grandes, naríz pequeña, labios de corazón, dos enormes senos que tienen problemas para caber en la ropa, una cintura chiquita y un par de nalguitas respingadas. Lo que menos me gustaba de mi cuerpo eran mis piernas porque son gorditas, de esas que parecen jamoncitos andando, pero ese tra...