Humillada pero contenta (I)

Una mujer cae en el vértigo de la pasión desenfrenada.

Hola a todos, mi nombre es Dora. Soy una mujer de 30 años, casada, muy buena posición social y económica, ya que soy ejecutiva importante de mi empresa. Mi marido, Jorge me mima a más no poder, ya que sinceramente, creo que me ama con locura. Aunque llevaba una vida alocada cuando adolescente, incrementada en la Universidad, ya que me la pasaba haciendo travesuritas, como acostarme con quien se me antojaba; me encantaba que saborearan mis húmedas partes y que me cogieran en cualquier lugar y ocasión. ...

Humillada pero contenta (II)

Una mujer cae el vertiginoso mundo del placer desenfrenado.

Una semana después, iba conduciendo presurosa hacia un restaurante elegante donde nos habíamos citado, al entrar y preguntar por él en la entrada, un mozo bien estirado me condujo a uno de esos reservaditos que se ubican en el segundo piso, donde la puerta es una cortina y hay una ventana con vidrios oscuros, que da vista a la parte baja del restaurante, todo con el ánimo de crear una ambiente romántico y privado a las parejas que buscaban intimidad. Al llegar ante Raúl, él se levantó y me recibió con...

El parque

Una chica disfruta ser asaltada sexualmente.

En primer lugar deseo expresar que todo cuanto voy a narrar es verdad, aunque alguna que otra vez, he deseado que no lo fuera, en otras que me sucediera nuevamente y que todos los que me escuchen y entiendan, puedan disfrutarlo plenamente, a como yo lo he hecho al escribirlo.

Hasta hace un mes, mi vida era la de una joven de 18 años, sin preocupación ninguna más que las normales; podría haber sido el ejemplo para las demás muchachas de mi edad: joven, con una cara que todos me dicen que es preci...