El arreglo de la tele de una vecina madura
Un problema en la tele de una vecina madura gordita acaba en un momento de pasión desenfrenado
Yo tengo 31 años, son un hombre bastante normalito físicamente tirando a gordito, vivo solo en un piso y siempre me han atraído las mujeres mayores, las maduras y si especialmente son tetonas mucho más.
Mi historia comienza una tarde en la que me encontraba en casa y llaman a la puerta, voy a abrir y veo por la mirilla a mi vecina Sandra, una mujer de unos 55 años, gorda y con unas tetas grandes, impresionantes, que siempre me han atraído.
Sandra: hola Carlos ¿qué tal?
Yo: Hola Sandra, bie...