Inflexión anal.

Aquél fin de semana iba a suponer un punto de inflexión en su jodida vida.

“Yo no soy gay” se decía, pero siempre le habían provocado un gran morbo las chicas – ¡con sorpresa entre las piernas! – y por timidez o falta de sinceridad, nunca se atrevió a decírselo a Jana, su novia. Así, lo que aconteció aquel finde -a partir de ahora WE- supuso un antes y un después, un punto de inflexión en sus relaciones y, lo más importante, ¡en su jodida vida!

Jana había quedado en salir todo el finde -¡WE!- de despedida de solteros y luego de boda con sus amigas y amigos, y no volvería has...

Hoy he vuelto a soñar con ella.

Al principio de conocernos, cuando nos comíamos haciendo un sesenta y nueve, comenzamos a introducirnos los deditos en el ano el uno al otro, a meterlos y a sacarlos hasta corrernos como nunca antes lo habíamos hecho.

Al principio de conocernos, cuando nos comíamos haciendo un sesenta y nueve, comenzamos a introducirnos los deditos en el ano el uno al otro, a meterlos y a sacarlos hasta corrernos como nunca antes lo habíamos hecho.

Fueron tan placenteros los orgasmos que tuvimos ambos, que incorporar este modo de hacer a nuestras relaciones no nos costó la más minima disputa. Era fantástico cuando ella se venía, cuando las contracciones de su anillo casi cortaban la circulación de mis dedos, cuando entonces yo me...

Esta noche volverás a ser mia

Hacía tiempo que tenía claro que me gustaban las chicas con sorpresa entre las piernas, hasta que decidí ser yo quien jugase ese papel.

Llevaba toda la semana pensando en ello, no quería olvidar ni un detalle. Había depilado, lubricado y perfumado todo mi cuerpo, el pubis incluso para que mi piel resultase femenina y suave. También me había vestido con la lencería más sexi que pude encontrar y un vestido ajustado con rellenos en las tetas.

A él aún no le conocía bién,

solo habíamos intercambiado nuestras fantasías, pero

la primera vez que nos vimos cruzamos complices miradas hasta que en un arrebato descontrolado me agarró...

Dos amigas

Ambas tuvimos el mismo orgasmo.

Una tarde, estando sola en mi habitación, empecé a acariciar mis pechos, a pellizcar mis pezones por encima del ligero blusón que llevaba puesto y cada vez más excitada, bajé hasta mi rajita.

Estaba ya muy caliente y húmeda cuando ella, mi mejor amiga, entró. Al sorprenderme en tal situación, me sentí avergonzada pero no dije nada. Ella sólo sonrió y me pidió que continuara, que no me preocupase porque también lo hacía muchas veces.

Que ella me estuviese observando me excitó aún más, así que...

Mi vecina

Aún me acuerdo de ella

En cierta ocasión, desplazado por razones de trabajo, me tocó una vecina ya madura, pero que estaba muy, pero que muy jamona. Siempre vestía ropa sugerente y mucho cuero negro, e iba exageradamente maquillada A menudo nos cruzábamos por la calle, en el super market, en el portal de la casa donde vivíamos, y siempre le clavaba la mirada, descaradamente, primero en los ojos de pestañas afiladas, luego en las tetas en punta y finalmente en su espectacular culo. Me tenía loco por echarla un polvo, o dos, y ella...

Hoy, él volverá a ser mi amante

Mi fantasía era vivir una experiencia breve pero intensa, exclusivamente de morbo y placer con un hombre pero...

Hoy depilaré todo mi cuerpo, el pubis incluso, para que mi piel resulte femenina y suave. Hoy me vestiré con la lencería más sexi. Hoy, él volverá a ser mi amante.

Nos habíamos conocido chateando, luego tomando copas en un discreto bar. El es moreno, de ojos verdes, corpulento y muy educado. Desde el primer momento cruzamos cómplices miradas.

De vuelta a casa, en el portal, me besó en los labios, cerré los ojos y mordió mis orejas, mis lóbulos… no tardó en convencerme para que lo hiciéramos,...

Manuel

Mi primer anal

Recuerdo que Manuel me contemplaba embobado, hasta que en un arrebato descontrolado me agarró del trasero y me apretó contra él.

Nos besamos tórridamente jugando con nuestras lenguas mientras acariciaba mis pechos, agarraba mis nalgas y pegaba su miembro duro contra mi sexo. Le tiré en la cama, desabroché su pantalón y deslicé  mi mano dentro del bóxer para liberar su pene.

Riendo, dejó que mis labios rozasen su miembro que chupé ensalivándolo. Eso le puso como loco y asiéndome de las axila...

Con el y sus amigos

Habían traído unas botellas de cava y nada para picar, brindamos...

Me puse un conjunto de trasparencias de seda negro, tanga a juego y medias de red. También unos zapatos con plataforma y tacón de aguja. Me miré en el espejo y quedé maravillado con mi aspecto.

Luego de perfumarme con la más femenina de mis esencias, salí contoneando el cuerpo, diciéndole que estaba muy caliente y lo íbamos a hacer como nunca lo habíamos hecho. Pero mi sorpresa fue mayúscula cuando lo encontré sentado en el sofá charlando con un amigo que yo ya conocía, y otro compañero suyo.

...

Descubriéndonos los dos

Ella había salido y estábamos los dos solos.

Durante el desayuno no coincidimos pero, a media mañana, nos sentamos en el sofá, delante del televisor a charlar un rato; hasta que la somnolencia de nuevo pudo conmigo...

No sé cuanto tiempo pasó hasta que entre sueños comencé a sentir su aliento cálido en mis orejas, su boca fuerte y dulce que me besaba. Entonces abrí lentamente los ojos y me encontré con su mirada que me acariciaba. Pensé estar soñando, que no podía tenerlo tan cerca de mí, pero al intentar desperezarme sentí el cuerpo inmoviliz...