Abismo
Me miré en sus ojos negros y me perdí en el abismo que prometían.
“No preguntes cómo, porque no lo sé... Sé que ahí está, esperando ser visto, esperando ser...
No preguntes por qué, pues la respuesta la tienes tú.
Si observas detenidamente, te darás cuenta que la razón sale sobrando!
En el corazón no se manda, los sentimientos afloran y ahí están, esperando ser devueltos al abismo del que han salido, y no quieren regresar...
Y esa espera no termina porque dices y no dices, porque el miedo ha vencido y prefieres la comodidad de lo manejable a la i...