Sobre como me comí a mi médica en su consultorio.

Una consulta con una dermatóloga termina con una impresionante sesión de sexo que incluye una fellatio realmente profesional y una doctora de espalda con sus pechos recostados en la camilla y ofreciendo su cola para que la atiendan de la mejor manera posible...

SOBRE COMO ME COMI A MI MEDICA EN SU CONSULTORIO

Esta historia es real y por eso voy a tratar de relatarla tal como sucedieron los acontecimientos.

Hace un tiempo comencé con una molesta picazón y sarpullido en la pierna izquierda y por eso decidí hacerme ver en la guardia dermatológica de una clínica.

Estando allí, luego de los trámites de rigor en recepción del sexto piso, me quedé esperando en la sala a que llegara mi turno. De pronto veo que llaman a una mujer que estaba justo ant...

Sobre como me comí a mi secretaria

Lorena ya ardía nuevamente de excitación, su concha estaba muy roja y húmeda y su culito era toda una invitación. Yo ya estaba completamente jugado y serle infiel a mi novia ya no era más que un secretito a mantener bien guardado entre mi secretaria y yo.

SOBRE COMO ME COMI A MI SECRETARIA

Esta historia empezó cuando le ofrecí el puesto de Secretaria que tenía vacante en mi oficina a una chica que conocía de la Facultad. No era una mujer demasiado llamativa. Boca grande, con labios carnosos, un metro sesenta y cinco, buenos pechos, pero algo rellenita, tenía tendencia a engordar y mostrar algunos rollitos en su cintura, sobre su culito nada despreciable; de todas formas a mi nunca me gustaron las mujeres demasiado flacas. Cuando Lorena, que era s...

Maratón sexual de una pareja de a tres

Mientras empezaba a quejarse por el dolor, Daniela me dijo que le iba a agrandar el agujero, a lo que yo respondí embistiendo una y otra vez contra ese culito delicioso que me hacía gozar como los dioses. En eso se acercó Alejandro, y Dani le manoteó la poronga y se la empezó a sacudir haciéndole una paja de aquellas.

Maratón sexual de una pareja de a tres.

Por Leocapo

En mi anterior historia ("Una pareja de a tres") les conté como había nacido el triangulo amoroso entre Daniela, Alejandro y yo, y como nos amamos desde ese momento como una verdadera pareja, aunque en la vida cotidiana la relación no resultó tan sencilla. Si existía algo que mantenía siempre encendido el fuego del amor esa era Daniela. Dani no tenía grandes pechos, pero su cintura y su culito eran perfectos. Su pelo negro, su sonrisa y su...

Una pareja de a tres

Alejandro, más brutal que nunca, la tenía en pelotas en cuatro patas y, mientras con una mano le enmantecaba el orto, como a un pollo al que se va a devorar con fruición, con la otra se agarraba la verga, tan enorme, dura y roja que parecía un hierro candente a punto de enterrarse entre sus nalgas.

La relación entre mi amiga Daniela y su novio Alejandro últimamente venía de mal en peor. Daniela me contaba que su novio era muy celoso, y prácticamente no la dejaba hacer nada sola. Mi amistad con Daniela venía de hace poco más de cuatro años. Al principio no me había fijado mucho en ella físicamente pero con el tiempo fui descubriendo muchas de sus cualidades.

No tenía grandes pechos, pero su cintura y su culito eran perfectos. Su pelo negro, su sonrisa y el color de su piel terminaban de dar...