Me vende sus bragas 2

Se giró cogiéndome la polla y masturbando a más velocidad de lo que yo lo había hecho nunca comencé a expulsar mi primer chorro de semen, ella al verlo se la introdujo en la boca hasta la mitad mientras que con la mano seguía masturbándome la otra mitad de polla que quedaba fuera de su boca.

Ya en la puerta se giró para darme un beso en la mejilla y despedirse pero entonces excupí una frase que sin pensarla surgió efecto:

  • Marga... cuanto me cobrarías por oler directamente de la fuente?

Ella se quedó totalmente quieta bajo el marco de la puerta. Miraba al suelo y de pronto entró de nuevo en mi casa cerrando la puerta tras ella.

-Toni, hace tiempo que hablamos mucho y ya te dije que no soy una pu...

Me vende sus bragas 1

Compro braguitas usadas, 20€ unidad". Eso fue todo el anuncio. Tampoco podía explayarme mucho en la oficina ya que aunque estaba casi solo en mi sala podía pasar alguien por detrás y conocer la web donde me encontraba.

Sé que es algo raro como comenzó todo, pero la verdad que uno nunca se espera que las cosas salgan así. Para los que no me conozcan soy hombre, de 43 años en el período de esta historia, de físico normal y cuidado por mi costumbre de ir al gimnasio 3 o 4 veces por semana. Esta historia transcurrió a la vez que alguna otra de las que he compartido con vosotros en anteriores relatos.

Mi perversión por todo lo sexual viene desde mi niñez, siempre oliendo bragas, intentando follar pagando o sin pagar... e...

Me quedé sólo con sus mascotas

Varios lechazos inundaron su interior, la perra comenzó a suspirar más fuerte (será ese el orgasmo de un perro???)

Aunque ya he publicado varias experiencias y relatos no me puedo creer que os vaya a relatar esta "anecdota" que me ocurrió. La verdad que últimamente he visto que la gente subía historias de zoofília y al final me he animado.

Llegué a casa de Sonia sobre las 3 de la tarde del viernes. Para poneros en situación yo estaba casado pero mantenía una aventura con una de las chicas del trabajo, nada sentimental pero como ella estaba soltera nos veíamos furtívamente de vez en cuando para follar en su casa o...

Vecinita despechada 9, increíble.

Se pusieron a bailar como antes en el bar, muy sugerentes y excitadas pero esta vez en lencería y sólo para mí! Me recosté un poco en el sofá, aunque no hubiese pasado nada más esa noche yo ya era feliz presenciando el espectáculo.

Aquel día algo cambió dentro de mí (leer relatos anteriores de la serie "vecinita despechada"), llegué a casa y como si me hubiesen dado una paliza me puse delante del ordenador tras ducharme pero creo que no aguanté ni 5 minutos despierto.

Sobre las 18:30h me despertó mi mujer, llegaba de recoger a las niñas al salir de su trabajo. Yo me levanté del escritorio con la espalda destrozada por la postura y justificando que me había tomado algo para el dolor de cabeza me había quedado dormido. Todo tran...

Vecinita despechada 8. Seguimos con su amigo.

Despacito porque María seguía algo agarrotada con la doble intrusión fui avanzando hasta meterla entera. Me quedé quieto, sentía ese culo que me fascina de mi vecina y la polla de su amigo haciendo presión en la mía. Menuda fiesta!.

Me comía las tetas de María como si fuera mi última cena, mi mano ya pajeaba directamente a Diego y él me masajeaba mis huevos mojados por mi propio pre seminal y restos de las anteriores corridas. Los oía gemir muy suave a ambos, uno a cada lado de mi.  María me separó un poco de sus tetas y se agachó entre mis piernas, al verla Diego hizo lo mismo.

Allí estaba yo, sentado en la cama y mi vecina y su amigo arrodillados luchando por conseguir espacio para meter su cabeza y comerse algo de mi. María se...

Vecinita despechada 7 siguen sus fantasías

Ahí los tenía a los dos lamiéndome entero por detrás, no se quién lo hizo primero pero comencé a notar como una lengua se abría paso entre mis nalgas hasta llegar a mi ano y se deleitaba en salivarme todo mi orificio. El placer era indescriptible,

Mi mujer se acababa de ir al trabajo tras limpiarse mi semen de su entrepierna. María me estaba esperando en su casa tal como me lo había dicho en el whatsapp y yo esperé unos minutos prudenciales por si Elena volvía a por algo olvidado. Subí al dormitorio a ponerme ropa y al quedar desnudo buscando unos calzoncillos me vino el aroma a sexo recién hecho de mi ingle. María lo quería así, nada de lavarme antes. Con cautela bajé al jardín para acceder a su casa por el seto y ella me esperaba mirándo desde la p...

Vecinita despechada 6. La ventana

Ella mueve su cabeza hacia atrás, con los brazos se asegura en la mesa. Su pierna izquierda reposa aún en esa silla dando accesibilidad a ese coñito caliente y yo pegado a ella la penetro suavemente como sé que le gusta comenzar.

El café estaba caliente. Mi mujer ya se había vestido para llevar a las niñas al cole y yo desayunaba tranquilo, esperándo mi momento de soledad para poder escribirle algo a María y quizá pasar a su casa. Debo admitir que estaba totalmente obsesionado con ella, ya todo lo demás era secundario para mí. Sabía que iba a estar sola hasta la tarde que vendría su novio y no quería desaprovecharlo. Ayer por la noche ese sexo violento que tuvimos me encantó. No soy mucho de sexo fuerte pero nuestros últimos encuent...

Vecinita despechada 5 voy a darte la merienda

No le hice caso, apunté y con la mayor fuerza de caderas que pude hacer la atravesé... de un golpe le había metido media polla, la presión de su ano sobre mi pene era increíble, casi me cortaba la circulación sanguínea en la punta, no me llegaba a doler pero por poco.

Volví a mi casa por el jardín. Me dolía el culo, los huevos...todo. Aun así volvía con la cara sonriente y los huevos vacíos completamente pero una vez dentro me puse a pensar. Esta chica me estaba volviendo loco, una cosa era follar con una amante de vez en cuando y otra muy diferente que ella me utilizase como juguete sexual para experimentar. Por un lado me gustaba y me daba morbo toda esta historia, por otro casi prefería ser yo el que se escapase a su casa de vez en cuando y la follase como a mi me die...

Vecinita despechada 4 y sus nuevas fantasías

Por la postura de ambos era más fácil para ella moverse adelante y atrás, se metía esa polla negra de látex bien dentro y la dejaba salir, al mismo tiempo sus movimientos se transmitían a mi parte de dildo en mi ano y me entraba y salía sin parar.

Era sábado, por supuesto mi mujer y mis hijas en casa y en la de la vecina ella y su novio. Se presentaban dos días en los que iba a ser imposible tener nada con ella. En fin tampoco quería obsesionarme, María era todo un extra en la vida matrimonial casi perfecta que yo tenía y en ningún momento se me ocurrió divorciarme para intentar algo serio con ella. Desde el principio lo habíamos dejado claro, nos lo pasábamos bien y así ella no se sentía tan mal cuando pillaba a su pareja con alguna prueba de cuerno...

Vecinita despechada 3

Casi sin sostener su cuerpo por el esfuerzo, su culo desnudo y algo rojo por la violencia del sexo y un chorrito de leche y flujo recorriendo la parte interior de sus muslos hacia el suelo.

Esta aventura que había iniciado con la vecinita me estaba sentando genial, por una parte ella estaba aumentando su autoestima y a la vez la mía también se elevaba, no es que tuviese crisis de los 45 años pero poder follar con una treintañera me animaba bastante. E incluso estaba más cachondo a todas horas, y por ello también me acercaba más a mi mujer por las noches. El sexo con mi mujer siempre había sido bueno pero no se puede negar que con los años uno va disminuyendo la actividad, pero el poder disfrut...