Rebeca
Mi historia con Rebeca.
Sus pechos oscilaban al compás de su risa, mientras me miraba con ojos de viciosa, sonriendo, quitándose la ropa. Su esbelta figura me llena los sentidos y apenas me puedo fijar en su cara. Pero sus poderosos ojos me hipnotizan y no me puedo apartar de ellos. -¡Concéntrate anda! Me acaricia la cara con sus senos y me frota la verga con sus manos, la excitación sube en mí hasta límites insospechados previamente. Se introduce mi miembro en su boca, apenas rozándolo con los labios, con esa sensación el...