Me cogió por coquetearle.
A los hombres no se les calienta y se dejan así.
me encanta calentar a los hombres con la mirada, los miro fijamente y de paso sonrió. Lo hago solamente porque me gusta que se confundan.
Una de esas tantas veces fui a un Moll con mis amigas, nos sentamos a comer y vi un hombre alto, guapísimos y agarrado, andaba con la novia y yo aun sabiendo eso empecé a mirarlo y sonreír.
El me seguía el juego de miradas.
Creo que la muchacha se dio cuenta porque todo empezó a volverse turbio entre ellos. Yo no volví a mirar otra vez. Tapaba mi rostro...